De las pajitas de plástico a las pajitas de papel

 

 

Ni una ni dos pajitas de plástico pueden considerarse un problema para el medioambiente.

Pero, ¿y 1 millón de pajitas?, ¿y 100 millones?, ¿y 1.000 millones?

¿Y si son 5.000 millones de pajitas de plástico?

¿O 36.000 millones?

 

 

Bueno, entonces, como quizás dijo el astronauta:

 

Houston, we have a problem

 

Una barbaridad de 13 millones de pajitas al día

 

Porque en realidad, aunque las cantidades nos parezcan casi imposibles, sí son casi 5.000 millones de pajitas de plástico las que se usan y tiran cada año en España (¡13 millones al día!).

Y unos 36.000 millones anuales las que se gastan anualmente en Europa

Una barbaridad, un gasto enorme y absolutamente inútil para todos aquellos/as que no necesitan realmente las pajitas para ingerir alimentos.

Y las cifras son contundentes:

Solo un 30% de los residuos de plástico de la UE  (incluidas las pajitas) se recogen para ser reciclados. Y, en muchas ocasiones, el plástico no reciclado acaba en el mar y las playas.

 

Llega la «Gran Prohibición»

 

Por ello, la Unión Europea aprobó una directiva que, a partir de 2021,  prohíbe totalmente plásticos de un solo uso, como platos, cubiertos, bastoncillos para los oídos, cajas para comida rápida y pajitas, claro.

Entonces, con la prohibición de los utensilios plásticos de usar y tirar, incluidas las pajitas plásticas, se disparó la fabricación y el uso de pajitas “ecológicas” de papel.

Todos nos dimos las gracias y nos felicitamos por el gran avance que habíamos realizado: ahora, utilizando las pajitas de papel ya podíamos se «ecológicos» y quitarnos un gran peso de nuestra consciencia.

 

¿Las pajitas de papel son la solución?

 

Pero, ¿de verdad las pajitas de papel son una buena solución medioambiental?

Hagamos una “proyección”:

 

 

Ni una ni dos PAJITAS DE PAPEL pueden considerarse un problema para el medioambiente.

Pero, ¿y 1 millón de pajitas?, ¿y 100 millones?, ¿y 1.000 millones?

¿Y si son 5.000 millones de pajitas de papel?

¿O 36.000 millones?

 

 

Bueno, entonces, si prohibimos las plásticas y nos lanzamos a por las de papel, como dijo el filósofo:

 

Planet, we have a new problem.

 

Porque al solución al consumo alocado y sin sentido de plástico no es el consumo alocado y sin sentido de papel.

Porque para producir “papel” necesitamos materia prima, es inevitable talar árboles, deforestar grandes áreas, consumir agua e invertir enormes cantidades de recursos energéticos y, para colmo, tras su uso y por su composición, muchas pajitas de papel ni siquiera van a ser compostables o reciclables y, menos aún, “ecológicas”.

Pero, ¿realmente necesitamos consumir pajitas de usar y tirar?

 

 

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